En nombre de la Junta de Gobierno de la Hermandad de María Santísima de la Paz y de todos sus hermanos y hermanas, queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a D. Luis Fernando Quintero Gómez por sus años de entrega y dedicación a nuestra Parroquia y a nuestra Hermandad.
Desde su llegada en febrero de 2020, D. Luis Fernando se ha destacado por su cercanía, humildad y sencillez, cualidades que desde el primer momento nos hicieron sentir que no solo teníamos un nuevo párroco, sino también un verdadero amigo. Su compromiso con nuestra comunidad y su amor por nuestra Sagrada Titular, María Santísima de la Paz, han sido un constante ejemplo y motivo de orgullo para todos nosotros.
A lo largo de estos años, hemos sido testigos de su incansable labor, siempre dispuesto a escuchar, ofrecer una palabra de aliento y guiarnos en la fe. Los cultos que ha presidido, con una devoción y entrega inigualables, han sido momentos de especial unión para todos los que formamos parte de esta Hermandad. Bajo su dirección, hemos vivido celebraciones llenas de espiritualidad que han fortalecido nuestros lazos de fe y fraternidad.
D. Luis Fernando no solo ha sido nuestro párroco, sino también un compañero cercano que siempre ha estado dispuesto a apoyarnos. En los momentos difíciles, su tranquilidad y buen consejo nos han ayudado a seguir adelante con esperanza y confianza.
Hoy, al despedirnos de él, queremos agradecerle de corazón su disponibilidad y servicio, siempre presente cuando lo hemos necesitado, y su amor incondicional hacia nuestra Hermandad. Su paso por nuestra Parroquia ha dejado un legado duradero en el pueblo de Teba, y su ejemplo seguirá siendo una referencia para todos nosotros.
Le deseamos lo mejor en su nuevo destino, seguros de que allí, como aquí, continuará brindando su calidez humana y dedicación. Sepa, D. Luis Fernando, que siempre tendrá un lugar en nuestros corazones y que Teba y nuestra Hermandad serán siempre su casa.
Con gratitud y cariño,
La Junta de Gobierno.